Pere Estunpinyà #NYC #DC
28-04-2014
A pesar de haber nacido en España, Pere vive a caballo entre Washington y Nueva York.
Es nuestro primer científico en este proyecto y la razón es sencilla: ha conseguido unir ciencia y sexualidad de forma sencilla.
En 2013 publicó S=EX2, el primer libro sobre divulgación científica de sexualidad en castellano.
¿Crees que en los estudios sobre sexualidad se centran demasiado en patologías?
Sí, y en cierta manera es normal que así sea. El estudio de la sexualidad humana es muy reciente, y resulta normal empezar por lo fundamental; por solucionar problemas.
En otras áreas de la medicina hemos llegado a un momento en que no sólo vas al médico cuando estás enfermo, sino también para estar mejor. Ya tenemos los problemas de desnutrición resueltos, las enfermedades infecciosas controladas, y podemos permitirnos buscar tener más calidad de vida. Esto mismo está empezando a ocurrir en la sexología: poco a poco empezamos a no conformarnos con tener una vida sexual “buena”, sino que queremos una mejor. De todas maneras, mientras escribía el libro, me di cuenta de la enorme cantidad de gente que tenía problemas relacionados con la sexualidad. Muchísimo mayor de lo que imaginaba. Y eso es porque yo, como todo el mundo, tenía un concepto de “normalidad” que gira alrededor de mi experiencia personal. Si yo y en mi entorno no tenía problemas sexuales, me costaba imaginar que tants personas sí lo tenían.
Este concepto de “normalidad” que gira alrededor de uno mismo es muy interesante: si follas con tu pareja una vez a la semana pensarás que eso lo normal, y si alguien te dice que lo hace una vez al mes, piensas: -“uy, qué poco”. Algo muy valioso que te da la ciencia es una mirada objetiva, que sitúa el epicentro de esta mal llamada “normalidad” no donde estás tú, sino donde hay muchas más personas.
¿Se abandona lo lúdico a la industria del sexo?
La industria del sexo puede ser una herramienta, y muy valiosa. Pero la dirección no la pueden llevar ellos pues dirán lo que les convenga para vender.
¿Crees que a mayor conocimiento sexual, mayor calidad de vida?
Un mayor conocimiento sexual te hace disfrutar más del sexo.
Para mejorar algo tienes que conocerlo, como todas las cosas. Si quieres cocinar bien, tienes que conocer tus ingredientes, procesos culinarios, y cuantas más recetas mejor. Cuanto mejor conozcas los productos que tienes en la cocina, serás mejor al combinarlos.
Igualmente un mayor conocimiento sobre los condicionantes físicos y emocionales de tu respuesta sexual te permite conseguir un mayor gozo sexual. Y mayor gozo sexual, en principio también incrementa la calidad de vida.
De todo lo que has aprendido o escribes sobre sexualidad, ¿hay algo sobre lo que no te sentirías cómodo hablando con tus padres?
Sí, la vergüenza también es un instinto que llevamos dentro, y que muchas culturas han incrementado. Con la mayoría de padres no se hablaba de sexo; no se recibía una educación sexual ni positiva ni negativa. El silencio era lo más habitual, y eso cuesta cambiarlo ya de adultos. Ahora está cambiando, y los padres jóvenes no ven este tema como tan tabú.